La estrategia de ataque en campañas políticas pasó de moda y es la que está eligiendo a Petro.

El ataque masivo de la derecha a Petro aniquila y reduce sus estrategias electorales.
Con su desconocimiento en manejo de campañas y falta de hilo conductor, le han brindado una plataforma de crecimiento a la izquierda que hoy se evidencia.
Es inadmisible aceptar que desconozcan los grandes lideres de la derecha, las nuevas tendencias y preferencias del pueblo elector en estos tiempos, más bien parecería que niegan el crecimiento de una propuesta que hasta hace poco parecía lejana e imposible de aceptar en nuestro país.
A quienes lideran la campaña de Fico que se convierte en la esperanza de los seguidores del sistema de derecha, les ha faltado doblegar y aceptar que existe un rival de su mismo tamaño y quizas mayor y por no reconocerlo lo tratan con improperios e irrespetos, dándole de esta manera el favoritismo del pueblo que entonces acoge por naturaleza protectora al más golpeado.
Falta humildad, respeto y el reconocimiento de los nuevos tiempos en materia del manejo de elecciones.
Atrás quedaron los viejos conceptos de los gamonales políticos que manejaban las tildes, las comas y hasta los puntos suspensivos de las campañas que hoy van demostrando que si no llevan las normas sociales y la debida puntuación que el pueblo espera, no serán entendidas y por el contrario serán rechazadas.
Algunos políticos de los pasados comicios, candidatos de avanzada en las regiones, lo entendieron y se convirtieron en esos personajes ganadores del corazón del pueblo, brindando en sus campañas propuestas envueltas en alegría, esperanza, colores y una imagen de amor o #brandinglove como lo llama su tendencia original.
Señores… a bajar los egos y entender que el sentimiento del ataque al opositor, no generará el estímulo del voto al elector.
Falta un mes para que el pueblo exprese su sentir y todavía nada está escrito. En política la ultima palabra la dan las urnas y eso lo sabemos.
También está claro que la política cambió y es hora de aceptarlo.
Lolita Celedón
Directora