¡Valledupar vamos armarnos pues!
Por: Lolita Celedón
Evidente que en los últimos días la capital del Cesar ha sufrido unos duros golpes en la seguridad, cosa que deja verse mejor, por supuesto, en la percepción que existe sobre ella y las quejas recurrentes que se leen a través de los medios de comunicación, las redes sociales o se oyen en las conversaciones cotidianas.
Los testimonios son muchos, el asesinato de Yisney Pedraza Flores, de tan sólo 25 años, en estado de embarazo, el hecho arrancó a los vallenatos del récord de más de 40 días sin un homicidio en la ciudad, nos dejó perplejos, conscientes de la poca valía que tiene la vida del prójimo para aquel que sale con un arma a matar sociedad.
¿Más? Varios asaltos en distintos puntos de Valledupar, con un sujeto que se paseó acompañado de un niño armado, sometiendo hasta a mis colegas periodistas, que esa noche supieron lo que era ‘Un verdadero Bololó’. Los atracos fueron captados por cámaras de seguridad y mostrados casi en tiempo real a los vallenatos y viralizados en las redes sociales, convenciendo algunos, como lo haría cualquier promoción exitosa de comerciales de televisión, que estamos ¡atrapados por el caos!
Todos estos casos sirven, cómo no, para exacerbar conductas, alzar voces de protesta, emitir fallos, acusar y calificar de malos los procesos de seguridad que se vienen brindando en Valledupar, pero precisamente el elemento que más incide en la proliferación del crimen es la división de la sociedad, del pueblo que está siendo víctima de los malos.
Innegable que existen 2 bandos, los criminales y la sociedad que espera su seguridad. Todos esperamos ser representados por el alcalde, Tuto Uhía, quien debe asumir su responsabilidad política, PERO NO CULPA Mientras no tomemos conciencia que esto es un juego de dos y no de un alcalde aunque lleve la voz cantante, no sabremos defender nuestra seguridad.
¡Afilemos los cuchillos y empecemos la verdadera batalla! Dejemos de desconocer las obras y el esfuerzo de un gobierno, que además es una coalición de fuerzas y que depende tambien de los resultados que la Policía Nacional le brinde. ¿Y debemos negar que el alcalde la ha estremecido? Como cualquier padre en desespero: La ha llenado de recursos, de implementación, la ha tratado con respeto. ¡Le ha gritado! Cambiado a sus comandantes, acusado con sus superiores nacionales, ha traído a Valledupar a los representantes nacionales de la Policía.
¿Y qué ha logrado? Superar los índices del pasado y resultados en seguridad que hoy no se reconocen, porque estamos peleando en un sentido equivocado, enfrentados los buenos con los buenos. Queriendo deslegitimar a un joven alcalde que no sólo ha llenado de obras físicas a Valledupar, sino que trabaja una huella imborrable en lo social.
Debemos armarnos ¡Con garra y ganas! Sin parar en una lucha contra los verdaderos enemigos de la sociedad.
¿A quién hay que darle el tiro? A los malos!!! Uno sólo… La unión estrecha e impenetrable del pueblo vallenato con su alcalde.